CASO MONSTRUO DE ARMENDARIZ
-La pena de muerte en el Perú-
A fin de
reconstruir el escenario histórico en el que se aplicó la pena de muerte en
este caso,
pasamos a la descripción de los detalles del mismo.
A) HECHOS:
El 07 de
setiembre de 1954, a las 11.00 de la mañana el niño Julio Hidalgo Zavala, de tres años
de edad, domiciliado en el Jr. Atahualpa Nº 158, en la ciudad de Lima, estando
ausente su madre, la señora Fausta Zavala por encontrarse efectuando compras domesticas,
salió para jugar con sus amigos en la calle. Siendo las 12:30 del día, Fausta
Zavala se percato de la ausencia de su hijo, solicitándole a su esposo el Sr.
Abraham Hidalgo que proceda a denunciar el hecho a la Comisaría de Barranco, en
la cual se le informo que debía transcurrir un lapso de 24 horas de
desaparecido el niño para que pudieran intervenir.44
|
Diario de la época |
Dos
jóvenes estudiantes, Marcelo Rojas Pérez
y Alfonso Navarro Vilca, que recorrían la quebrada
de Armendáriz quedaron pasmados ante un sobrecogedor hallazgo, el cuerpo sin
vida de un niño de tres años con huellas de haber sido golpeado en la cabeza,
se encontraba en una covacha de Barranco. El horror se divulgo rápidamente por
las calles, el lugar se colmo de policías, periodistas y curiosos, un hombre de mediana
estatura, delgado y de bigotes ralos se acercaba, era el albañil Abraham
Hidalgo, quien desde la noche anterior estaba buscando a su pequeño hijo Julio
Hidalgo Zavaleta, se abrió paso entre la gente, oyéndose un grito de dolor que despertó la
avidez de los reporteros y de los detectives, pues era su hijo.45
El
niñito Hidalgo tenía el pantalón bajado y pequeñas erosiones en la frente; la
policía conoció del
hecho movilizándose para poder esclarecer el caso 46
Al
día siguiente, los .titulares de los periódicos publican el asesinato en
Armendáriz, exigiendo además a la Policía Nacional del Perú la captura
inmediata del asesino. La búsqueda fue intensa, un número importante de
guardias civiles y republicanos se movilizaron por los lugares 44
El
Caso de Jorge Villanueva Torres, “el Monstruo de Armendáriz”, Pág. 1. 45
Perú 21,
Domingo 11 de setiembre de 2005, página 15. 46
Ibídem. 36
cercanos
del crimen, realizando redadas en chinganas y en billares del lumpen limeño, como es
lógico de esperarse, la población
presiono para encontrar un culpable.47
|
Dr. Carlos Enrique Melgar L. |
Días
después, un vendedor de turrones de nombre Uldarico Salazar, que trabajaba en la calle
Atahualpa, hoy Alberto Lafon, donde vivía la familia de la víctima, afirmó que
un individuo afro descendiente que se llevaba al niño por la quebrada de
Armendáriz le compró una melcocha para el niño, manifestó que “era un sujeto
negro y alto (…) me compro 20 centavos de turrón para el niño. yo lo puedo
reconocer” 48; entre las fotografías
que le mostraron en investigaciones, identifico a Jorge Villanueva Torres como
el sujeto que a las 11.00 de la mañana del día 07 de setiembre, lo detuvo
cuando se retiraba del Parque de Barranco para comprarle unas melcochas, este
lo describió
por sus características personales: pantalón marrón, zapatos mocasines, dedo
pulgar chato, etc. Estas minuciosidades fueron comprobadas en Villanueva
Torres.49
El
“testigo” declararía después a la prensa: “Logré identificarlo porque tenía un
dedo torcido,
con el hombre que me compró el dulce para Julito (el niño asesinado)”,Ulderico
Salazar.50
Jorge
Villanueva Torres, conocido como el “negro Torpedo” fue bautizado por la prensa como
el “Monstruo de Armendáriz”.51
En
las calles de Lima, como era de predecirse la gente exigía que le aplicaran la
pena de muerte, se realizaron manifestaciones por las calles de Barranco, en
donde los pobladores exclamaban “Muerte para el monstruo”, incluso la prensa
apoyaba la pena de muerte para Villanueva.
Un ejemplo
de ello, es el titular del diario La Crónica del 15 de septiembre de 1954 el que
expresó: “Es el crimen más cruel de todos los tiempos y merece ser castigado
por la muerte”.52
Es
así que tiempo después encontraron a
Jorge Villanueva Torres, el ya apodado “Monstruo de Armendáriz”, quien
había confesado todo a la policía, según decían los periodistas. Y aunque
conforme al protocolo de necropsia de la victima estableció que ella nunca fue
violada, la prensa lo calificó de depravado y de violador 53.
El
proceso estuvo cargado de racismo, deseo de venganza colectiva y el objetivo exacerbado
de limpieza social en una Lima conservadora, moralista y despiadada 54.
47 El Monstruo de Armendáriz: ¿Quiénes son los
que van al paredón?. Pág. 1. 48 Perú 21,
Domingo 11 de setiembre de 2005, página 15.
49 Diario Extra, semanario de actualidad, año
IV-145.
50 Perú 21, Domingo 11 de setiembre de 2005,
página 15.
51 Ibídem.
52 Diario
La Crónica del 15 de septiembre de 1954.
53
“Con indicios no se condena a muerte. No hay convicción, miente el
turronero. En caso de duda hay que estar a lo favorable al reo, ¡Indubio pro reo!. (Carlos Enrique Melgar/
Abogado defensor).
54http://lacombivisual.blogspot.com/2007/12/medio-siglo-del-caso-del-monstruo-de.html
37
En
las calles de Lima, la gente exigía que le aplicaran la pena de muerte. Hubo
una
manifestación
pública por las calles de Barranco, donde vivían los familiares de la víctima.
"Muerte para el monstruo", gritaban los vecinos
55.
Jorge
Villanueva Torres, desde su niñez tuvo un comienzo criminal que con el tiempo
fue
creciendo, cuando era niño era conocido como "pájaro frutero",
terminó que se le daba a lo que hoy en día conocemos como "pirañitas"
(niños ladrones). Así su pasado, delincuencial fue creciendo, robando en
tranvías que surcaban Lima atiborrados de gente y reforzando su imagen de
ladronzuelo. Cuando por fin cumple los 35 años, este señor ya había pisado la
cárcel y tenía una muy bien ganada imagen de vago y ladrón de poca monta en las
comisarías 56.
B)
PROCESO PENAL EN CONTRA DE JORGE
VILLANUEVA TORRES:
El
proceso se inicio en el Tercer Tribunal Correccional de Lima, integrado por los
doctores
Octavio Santa Gadea, presidente, Octavio Torres y José Merino Reina.
Pasaron
tres años de su juicio, cuando a pedido
de Jorge Villanueva, el abogado
Carlos
Enrique Melgar tomó la defensa, este era un joven abogado sanmarquino, que
trato de demostrar que su cliente era inocente,
habiendo logrado que, en solo un mes y medio, se retire el cargo de
violación.
Los
fundamentos de la defensa fueron que la confesión ante las autoridades
policiales se dio
porque hubo presión de tipo moral, y que el hecho de hallar al menor a medio
vestir se ha aseverado el tipo de delito, pudiendo haber sido víctima de un
indolente chofer, quien luego de arrollarlo pudo haberlo llevado hasta el lugar donde lo hallaron,
produciéndose la asfixia por la acción inconsciente del propio menor.
El
testimonio del turronero fue demoledor, este juro que Villanueva fue el hombre
que llevaba al
niño a la quebrada, Villanueva se defendió como pudo, afirmo que los policías
lo habían obligado a auto culparse, nadie creyó en su palabra, pues durante la
audiencia demostró ser un tipo rebelde, díscolo, conflictivo y contestón 57.
En
el banquillo del acusado, el “Monstruo
de Armendáriz” lloro amargamente, sus expresiones fueron de
desesperación cada vez que los magistrados levantaban la mano señalándolo como
criminal, este manifestaba: “yo no podría matar a un chiquito”.
En
los rostros de los jueces y Fiscales no se reflejo el menor gesto de piedad por
el “Monstruo
de la quebrada”; periodistas, fotógrafos y curiosos que siguieron paso a paso
las incidencias de los últimos debates, centralizaban sus miradas sobre las
caras de los magistrados cada vez que lloraba el acusado. Hubo silencios
prolongados que esperaban una reacción que tardo en llegar.58
El
08 de octubre de 1956 se llego a sentencia, los magistrados, sometidos a la
presión popular, lo
condenaron por homicidio a la pena de muerte, de acuerdo con el Decreto
Ley N°
10976, de fecha 25 de marzo de 1949, emitida por la Junta Militar de Gobierno encabezada
por el general Manuel Odría, que modificaba el Código Penal de 1924. Se
55http://peru21.pe/impresa/noticia/cronica21-monstruo-que-fue-al-paredon-pese-dudas/2005-09-
11/147691
56http://www.wix.com/sandriitaty/blog1#!albumphotos8=2
57Perú 21, Domingo 11 de setiembre de 2005,
página 15.
58Diario Extra, Año II -90. 38
fijó nuevas
causales para aplicar pena de muerte,
extendiéndose la sanción al que matara a su ascendiente, descendiente o
cónyuge, así como al que asesinara por ferocidad,
gran perfidia, lucro o para facilitar u ocultar otro delito.
Fue bajo
este régimen que se ejecutaron los tres únicos casos de fusilamiento de individuos
violadores de niños
59, y en aplicación del artículo 152º del Código
Procedimientos
Penales, puesto que según el protocolo de autopsia de la víctima nunca hubo
violación.
Al
leerse la sentencia, Villanueva estallo en ira, trato de agredir a los
magistrados, fue maniatado,
luego con voz quebrada, el sentenciado insistió en su inocencia, este
manifestó: “Yo he cometido muchos delitos…he sido un hombre malo …pero este
crimen no me pertenece”.60
La
sentencia de primera instancia fue confirmada el 09 de diciembre de 1957,manteniéndose
la pena capital para Villanueva por los delitos de rapto y homicidio en agravio
del menor Julio Hidalgo Zavala, delito contra las buenas costumbres en agravio
de Alonso Navega y delito contra la libertad individual en agravio de Donato
Marcelo Rojas y Julio Araveña.
El
fallo decía a la letra: “Con inequívoca certeza de que es agente responsable de excepcional
peligrosidad y conducta inmodificable se reclama la mÁs severa sanción”. 61
El
abogado defensor, Dr. Carlos Enrique Melgar, pese a sus planteamientos
doctrinarios y legalistas perdió la causa. En vano recurrió al Congreso en la
demanda del derecho de gracia que contemplaba el artículo 123 de la
Constitución del Estado.
El
Parlamento no se pronuncio debido que al
computarse el quórum de la sesión del Congreso
que había sido convocada para revisar el pedido de gracia formulado por la
defensa de Villanueva Torres solo respondieron diecinueve senadores, por lo que
se levanto la sesión 62.
"Con indicios no se condena a
muerte. No hay convicción, miente el turronero. En caso de duda hay que estar a lo favorable al reo,
¡Indubio pro reo!", (Carlos Enrique Melgar/
Abogado defensor)63
C) EJECUCION DE JORGE VILLANUEVA TORRES
Los medios
que se habían encargado de estar al tanto de cualquier novedad en este caso que
había conmocionado a la opinión pública se interesaron por relatar los últimos
momentos de vida de Villanueva Torres.
Así
podemos citar al diario El Comercio en su edición del miércoles 11 de diciembre
de 1957:
“Las Últimas horas del sentenciado a muerte.
59
http://peru21.pe/impresa/noticia/sabia-que/2005-09-09/68551)
60Perú 21, Domingo 11 de setiembre de 2005,
página 15.
61Ibídem.
62Diario Extra, Año II -90.
63http://elcomercio.pe/edicionimpresa/html/2007-12-09/a-50-anos-fusilamiento-monstruo-armendariz.html
39
Jorge
Villanueva se cambio de terno ayer después de bañarse. Su ánimo era de los
mejores. Durante un buen rato estuvo tocando guitarra en la celda especial
donde ha sido aislado (…)
A
las 09 de la noche se acostó despidiéndose antes del vigilante del penal y del soldado de
la guardia republicana que lo custodian.
A
poco, durmió plácidamente sin despertarse toda la noche…
A las 6 de
la mañana de hoy se levanto de la cama el “Monstruo de Armendáriz”. A las 6.30
tomo su desayuno consistente en café con leche y dos panes con
mantequilla. El servicio se cumplió en la celda.
Al igual
que ayer no demostraba ningún temor por la muerte, no obstante que ya sabe
extraoficialmente su condena. Durante la mañana el sentenciado a muerte estuvo
contemplando el jardín que da frente a su celda. No perdió el control en ningún
momento.” 64
Las
últimas catorce horas de vida del “monstruo de Armendáriz” son una serie de protestas
de inocencia y de acusación a la justicia, el Juez Carlos Carranza Luna fue
el
encargado de notificar a Jorge Villanueva Torres de que la Corte Suprema había dado el
fallo definitivo, confirmando la pena de muerte, señalando: “vengo a anunciarle que la
condena de muerte ha sido confirmada y que será fusilado”. El juez pronuncio
esas frases que temblaban y su rostro estaba pálido completamente. La actitud
de Villanueva fue serena, había una tranquilidad rara en él. La noticia era
desconcertante pero los funcionarios fueron los que quedaron desconcertados
ante esta actitud, paso un momento de silencio donde había tensión, el
escribano Froilan Manrique, inicio la lectura de
la sentencia, y Villanueva comenzó a reaccionar y repentinamente gritó:
“Pueden
leer lo que quieran – y dirigiéndose al Juez- Ud. sabe que yo soy inocente,Ud. me hace
matar y puede hacerlo cuando quiera”. El sacerdote capellán del panóptico se acerco a Villanueva y lo reconforto, y
Villanueva respondió al sacerdote:
“ Ud. sabe
padrecito que soy inocente, este nomás- señalando al Juez- tiene la culpa de todo, yo
no lo perdono, que Dios lo perdone”, el escribano continuo la lectura,mientras
Villanueva guardo silencio hasta la
terminación, el Juez pidió a Villanueva
que firmara
el acta, pero este le respondió: “con firma o sin firma pueden matarme igual,
soy inocente”, el Juez no espero mas y se retiro conjuntamente con el
escribano, quedando con Villanueva su abogado Carlos Enrique Melgar y el
sacerdote, este ultimo comenzó a prepararlo para el momento de la ejecución y
Villanueva se confeso.
Terminado
este acto religioso ingreso a su celda, su abogado, a quien le entrego una carta
dirigida a su hijo de siete años de edad, llamado como el, Jorge Villanueva, el sobre estaba
cerrado y Villanueva lo extrajo del bolsillo izquierdo de su mameluco azul descolorido,
durante tres horas permaneció el condenado con su defensor y en ese tiempo le
pidió a su abogado que le cumpliera algunos encargos y que le explicara a su
hijo lo que había ocurrido cuando tuviera uso de razón: “dígale que no se
avergüence
de mi y que el tiempo esclarecerá todo”; el defensor lo consoló y le aconsejo
que siguiera sereno, que el hasta el ultimo momento trataría de evitar la
ejecución, y a eso de las ocho de la noche regreso el sacerdote, retirándose el
abogado, momento en que Villanueva comenzó a llorar. 65
El
día del fusilamiento a las 03.15 a.m. llego el juez instructor Carlos Carranza
Luna,se le
prohibió la entrada a los reporteros gráficos, en el lapso de una hora y cuarto
llegaron
los médicos legistas Jorge Gaviria y Fernando Gambirazzio, y siendo las 64
Diario
El Comercio en su edición del miércoles 11 de diciembre de 1957.
65Diario Extra, semanario de actualidad, año
IV-145, Pág. 8. 40
05.05 a.m.
se inicio el ingreso al patio en el que se debía efectuar la ejecución, las
personas presentes sumaban sesenta y siete.
En un patio
de veinticuatro metros de largo por veintidós metros de ancho se encontraba
colocada una mesa con un lamparón donde tomo asiento el Juez instructor y el
escribano Froilan Manrique. Al centro del patio se coloco el madero donde seria
colocado Villanueva y detrás del mismo, costales de arena. 66
Al
promediar las 5:30 a.m. del 12 de diciembre de 1957, de una friolenta y nublada
mañana, fue llevado con mucha violencia a la Penitenciaría de Lima, situado en
lo que hoy se conoce como el Sheraton y el Centro Cívico, había sido insultado,
golpeado, caminaba esposado, con un overol jean azul muy gastado y descalzo,
caminó hasta el
patio donde
sería ejecutado, Víctor Maurtúa, quién
era médico legista presenció la ejecución 67,
fue amarrado a un poste de madera con
una soga.
A
las 5.38 a.m. se hizo presente en el patio el pelotón de fusilamiento compuesto
por ocho
soldados de regimiento de la guardia republicana, al mando del alférez Orlando Carrasco, y cuando el pelotón de fusilamiento iba a
hacer fuego, grito: “soy
inocente, yo perdono a Uds.… pero a el- dirigiéndose al Juez- asesa…. Y una
descarga cerrada corto las frases, 68
sonaron
ocho disparos, impactaron tres disparos en su cuerpo, Carrasco se acerco y de
acuerdo a ley le proporciono el tiro de gracia, acabando todo a las 05.40
a.m., hora en que los médicos constataron su muerte y el cadáver se bajo
del poste,
colocándolo en un ataúd de madera negra, luego de lo cual levantaron el acta de
fusilamiento de acuerdo al procedimiento ordinario.
Afuera,
algunas mujeres lloraban, mientras los hombres comenzaban a preguntarse si de
verdad Villanueva era el temible “Monstruo de Armendáriz”.
Cuando
los reporteros preguntaron al capellán si un hombre podía mentir estando a un paso de la
muerte, el religioso contestó: "Yo creo que el final es la hora de la
verdad".
Con estas
palabras crecieron las dudas.
Media hora
después de que se había escuchado la descarga y los médicos habían constatado
la muerte de Villanueva, salió por el portón de la penitenciaria un vehículo
plomizo llevando el ataúd, seguido de carros patrulleros y autos de los
periodistas. En el lugar destinado para los muertos sin familia se detuvo la
carroza y fue extraído el ataúd por empleados de la administración del
Camposanto, siendo enterrado en una fosa por orden de un comandante de la
guardia civil, quien se negó a esperar que se
cumplieran
los tramites de ley pese a la insistencia de unos de los empleados de la Beneficencia
Pública; el cadáver de acuerdo al Acta sentada a la ejecución, debía entregarse
al Dr. Carlos Enrique Melgar, defensor del ejecutado, quien lo había reclamado
para darle cristiana sepultura; pero pocas horas después tuvo que ser desenterrado pues el Dr. Melgar efectuó todos los trámites
correspondientes para que le hagan entrega del cuerpo sin vida de Villanueva.69
66 El Caso de Jorge Villanueva Torres, “el
Monstruo de Armendáriz”, Pág. 5
67 Víctor Maurtúa advierte: “Me llamó la atención
que hasta el último momento insistiera en su inocencia.
Pedí el
expediente del caso y me dijeron que estaba perdido. Pero logré conseguir el
protocolo de necropsia y no hay evidencias que prueben el crimen” 68
Diario
Extra, semanario de actualidad, año IV-145, Pág. 8
69Diario Extra, semanario de actualidad, año
IV-145, Pág. 10 41
Días
después, en una entrevista a Ulderico Salazar, el testigo más importante del proceso, el
turronero dijo: "Espero que la
sociedad me dé un trabajo estable para mantener a
mis tres hijos".
El
diario La Prensa informó que Salazar se había contradicho más de 30 veces durante el
proceso. Las dudas en torno a la culpabilidad de Villanueva han dejado un sabor a
remordimiento sobre la pena capital para uno de los delitos más horrendos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario